La presencia de los dominicos en León se remonta a 1250. Ya entonces tenían el convento de Santo Domingo, situado extramuros de la ciudad, dando la casualidad de que hoy es el centro de León, por lo que su plaza se sigue llamando “de Santo Domingo”. Los frailes se dedicaban a las tareas apostólicas y docentes en los estudios de filosofía y teología, a los que asistía la mayor parte del clero secular.

Si salimos de la ciudad y nos vamos a la provincia nos encontramos con que los dominicos tuvieron en ella varios conventos: Valencia de don Juan (1431), Palacios de Valduerna (1461), Astorga (1480), Santa María la Real de Trianos (1515). Las tropas napoleónicas quemaron el convento de la ciudad en 1809. Los pocos frailes que quedaron restauraron pobremente el convento, que desapareció como tal poco después con la desamortización de Mendizábal.

En este contexto histórico, se entiende que los dominicos fueran nombrados, por un espacio de tiempo muy breve (1514-1515), capellanes de la ermita de la Virgen del Camino.

La nueva llegada de los dominicos a La Virgen del Camino se gesta en 1952. Ese año, en Vegaquemada, pueblo natal de D. Pablo Díez, se reunieron D. Luis Almarcha, obispo de León, el P. Manuel Suárez, Maestro de la Orden de Predicadores, el P. Aniceto Fernández, Provincial de la Provincia de España y D. Pablo. Pero fue en 1954 cuando D. Luis Almarcha, en carta pastoral, comunica la construcción de un  nuevo Santuario y el encargo a los Dominicos de su custodia. “Hemos puesto al servicio del Santuario una orden religiosa, tan mariana y tan española como la de Santo Domingo”.

También se anuncia la edificación de un convento de los dominicos, desde donde puedan atender al santuario, y de un colegio, seminario menor. Todo ello sufragado por D. Pablo Díez y llevado a cabo por el arquitecto dominico Fray Francisco Coello de Portugal. La comunidad de dominicos se erigió canónicamente el 24 de junio de 1955.

Este colegio, escuela apostólica, se inauguró en 1957 y se mantuvo abierto hasta 1996. Por él pasaron varias generaciones de jóvenes recibiendo una sólida formación humana y cristiana. En 2007 se celebró el cincuentenario del colegio con amplia asistencia de profesores y antiguos alumnos.

El Santuario fue inaugurado el 5 de septiembre de 1961. Y desde entonces los dominicos siguen siendo sus custodios, cuidadores, atendiendo a tantos devotos que lo visitan.

Hay que añadir otro servicio eclesial desde el convento de los dominicos: la Casa de Ejercicios que desde su inauguración en 1958 han pasado y siguen pasando numerosos ejercitantes, en búsqueda de sosiego y de intensificar su vivencia del evangelio.